BUENO, BONITO Y VARATO,DIEZ CONCEJOS PARA STAR FASHON

1. Organiza primero tu ropero. Elimina todas las prendas que no te sirven o sienta bien y trata de coordinarlo por colores y funciones. Haz un inventario de las prendas que tienes y de aquellas que primero necesitas para tu estilo de vida. Crea una lista y fija un presupuesto

.2. Recupera prendas del pasado de calidad visitando a un sastre para darle nueva vida y uso.

3. Antes de salir de compras, investiga un poco por Internet o las revistas los estilos que buscas y compara precios. Si es ropa clásica, puedes esperar a la temporada de descuentos para ahorrarte más dinero.

4. Cuando compres una prenda, pregúntate si la puedes utilizar durante todo el año, así tienes más opciones. Si vives en lugares con cambios de clima muy fuertes, compra las prendas fuera de temporada y solo compra cortes clásicos y colores y diseños que te favorezcan.

5. No tengas miedo a probarte toda la ropa que desees. Cuanto más experimentes mejor. No por entrar en una tienda y probarte ropa tienes que comprar. Es bueno que compares diferentes estilos, marcas e incluso tallas antes de tomar la decisión final.

6. Invierte en los tejidos lisos, cortes clásicos y colores neutros. Estas prendas cuanto de más calidad mejor, pues las podrás utilizar por muchas temporadas y luego combinar con colores, accesorios y diseños de moda

.7. Los accesorios son el mejor secreto para estar a la moda y reflejar tu estilo sin gastarte mucho dinero.

8. Invierte en ropa con dinero solo si es de calidad y lo vas a utilizar en muchísimas ocasiones. Ya sabes, lo barato a veces puede resultar caro. Unos buenos jeans, un buen zapato o un traje sastre son imprescindibles en tu guardarropa.

9. Además de las tiendas usuales, descubre las increíbles opciones que tienes en las tiendas 'outlet' de tus marcas favoritas, así como tiendas 'vintage'.

10. La moda siempre regresa. La gran mayoría de los diseñadores se inspiran en temporadas pasadas para sus nuevas colecciones. Por eso la ropa de segunda mano puede ser una buena alternativa y muy económica. Asegura que la ropa está en buen estado o la puedes arreglar sin costarte más dinero del que necesitas para una prenda nueva.